Crítica publicada en el diario Tiempo Argentino, el lunes 30 de junio.
El año pasado, en el marco del festival internacional de teatro de Buenos Aires (FIBA) Rafael Spregelburd, uno de los principales representantes del actual teatro argentino, estrenó su “ópera hablada”: Spam. Para quienes en ese momento se quedaron sin entradas para alguna de las tres funciones que se dieron en el Centro de Experimentación del Teatro Colón, ahora pueden disfrutar de este espectáculo en la sala El extranjero, en el barrio del Abasto.
Este mismo espacio fue la sede de la obra anterior de la dupla Spregelburd-Zypce, Apátrida, y si bien entre ambas existen elementos comunes -música experimental en vivo a cargo de Federico Zypce, el poder de la palabra por sobre la escenografía-, Spam tiene grandes diferencias y forma un complejo mecanismo teatral.
La ficha
- Autor y director: Rafael Spregelburd
- Elenco: Rafael Spregelburd, Federico Zypce
- Dirección musical: Federico Zypce
- Funciones: miércole, jueves y viernes, 21 hs.
- Teatro: El extranjero (Valentín Gómez 3378)
Durante las dos horas que dura la obra, el autor envuelve lentamente al espectador en la historia de Mario Monti, un profesor napolitano que sufre un accidente y pierde la memoria. Así se irá armando el rompecabezas con los hechos y situaciones que llevaron a este personaje a situaciones delirantes que incluyen la isla de Malta, un lenguaje antiguo perdido, mafias pseudochinas y correo electrónico basura, por mencionar algunas.
Spregelburd, que ya en trabajos anteriores utilizó elementos multimediales en donde el video forma parte de su lenguaje teatral, continúa en Spam con esta modalidad, pero además incluye cámaras infrarrojas en vivo, que se fusionan con la historia de manera impecable. Nada está librado al azar, todo encuentra su espacio y su respuesta, a su debido momento. Cada objeto tiene una función y el espectador será invitado a descubrirlo y a completar esta historia.
Spam escapa a los cánones tradicionales del teatro y hasta podría pensarse como una instalación artística. Es una obra ambiciosa, pretenciosa y compleja, y es justamente eso lo que la hace cautivante y seductora. Es una invitación al público a pensar, a construir una historia junto a los artistas, a meterse en mundos delirantes y ficticios para llegar a un final abrupto y pensar en la propia identidad.